AlzaTuVoz: Tigre y Zika, los mosquitos asesinos
“La Fiebre Zica, se trata de una nueva enfermedad en el continente, causada y transmitida por el mismo mosquito que el Dengue y la Chikungunya. Una nueva amenaza para la salud en el Mundo”
El virus de Zika está presente en zonas tropicales con alta densidad de mosquitos. Se sabe que circula por África, las Américas, Asia meridional y el Pacífico occidental.
El virus de Zika se descubrió en 1947, pero durante muchos años solo se detectaron casos humanos esporádicos de la enfermedad en África y Asia meridional. En 2007 se declaró en el Pacífico el primer brote documentado de enfermedad por el virus de Zika. Desde 2013, se han notificado casos y brotes de la enfermedad en el Pacífico occidental, las Américas y África. Dada la ampliación de los hábitats en que los mosquitos pueden vivir y reproducirse a causa de la urbanización y la mundialización, podrían producirse importantes epidemias urbanas de la enfermedad por el virus de Zika en todo el planeta.
El virus se transmite a través de la picadura de un mosquito infectado del género Aedes, el mismo que transmite el dengue, la fiebre chikungunya y la fiebre amarilla.
Solamente pican las hembras del mosquito, que se alimentan de forma intermitente y picando a más de una persona. Una vez saciada, la hembra necesita reposar durante tres días antes de poner los huevos, que pueden sobrevivir hasta un año sin agua. En presencia de agua, y basta con pequeñas cantidades de agua estancada, los huevos evolucionan a larvas y finalmente a mosquitos adultos. Los mosquitos se infectan al picar a portadores del virus…
El mosquito tigre (Aedes albopictus) es una especie de díptero nematócero perteneciente a la familia Culicidae. Se caracteriza por su coloración negra con ornamentación blanca en tórax y abdomen, patas a bandas negras y blancas y una conspicua línea blanca longitudinal central en tórax y cabeza. Tiene una longitud de entre unos 5 y 10 mm. Como otras especies de mosquitos, la hembra posee una trompa fina y alargada, la probóscide, que a modo de estilete, utiliza para picar y extraer sangre de vertebrados, en especial mamíferos y aves, que aprovecha para el desarrollo de los huevos a modo de proteínas, utiliza unos pequeños filamentos (bigotes) a los lados de la probóscide para detectar dióxido de carbono (CO2) proveniente de animales (incluidos seres humanos) a las que acechar, en sus picaduras utiliza una sustancia anticoagulante para extraer y almacenar la sangre de su huésped. Los machos de la especie, al igual que la de otros mosquitos, se alimentan de néctar. Está incluida en la lista 100 de las especies exóticas invasoras más dañinas del mundo1 de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.